Usar perfume es un signo de coquetería y elegancia tanto para las mujeres como para los hombres. Además, el perfume es el accesorio indispensable que le da a toda persona un toque de sensualidad y seducción.
El perfume habla mucho sobre la personalidad, este puede describir si es delicada, jovial o de carácter fuerte. Todo ésto a través de sus aromas que pueden ser frutales, florales, lujosos o regios.
Para nadie es un secreto que el uso de fragancias despierta sentimientos de alegría, bienestar, tranquilidad y confianza, lo que permite que tanto hombres como mujeres puedan aumentar su autoestima. Así lo describe la Asociación Internacional de Perfumería de América del Norte.
La afamada diseñadora Coco Chanel, siempre decía que una mujer que no use perfume no tiene futuro, puede ser que su afirmación no sea cierta, pero toda mujer que use perfume es porque se preocupa por ella y por su apariencia.
Las personas deben preocuparse por tener confianza en sí misma, esa es la clave del éxito personal. Usar perfume da más seguridad porque ya se sabe que a través de él se puede atraer los sentidos de quienes nos rodean.
Tanto mujeres como hombre suelen fijarse en primer lugar en las apariencia física del otro, el ser humano es visual. Sin embargo, una fragancia puede generar una impresión más perdurable, ya que si una persona huele bien, muchos se verán tentados a acercarse y si no huele bien la reacción primaria es alejarse.
Si una persona usa a diario un perfume logra cambiar su estado de ánimo, irradia sensualidad con su aroma e impacta con su personalidad. Pocas gotas de perfume en la piel pueden cambiar las emociones de quien lo use o hasta de quien lo perciba.
Dicen que las fragancias dejan recuerdos inolvidables, quién no ha recordado un viejo amigo o antiguo amor o incluso a los padres sólo con percibir algún aroma en particular. Es que a través del perfume la persona logra definirse.
Hay que recordar que el olfato es el sentido que está más conectado al subconsciente, por eso el ser humano recuerda el 35 % de lo que huele y el 5 % de los que ve.
Mujeres y hombres que quieran sentirse más seguros, que deseen que los recuerden y que quieran ser más atractivos o sensuales, solo deben elegir un perfume que vaya a tono con su personalidad y de seguro impactarán donde quieran que vayan.
La respuesta es totalmente afirmativa, el perfume tiene la particularidad de hacer más atractiva a la persona que lo usa, incluso es un arma de seducción que se puede combinar con el maquillaje, el atuendo y los accesorios que lleve puesto una persona.
Estudios afirman que todos los productos que contienen aromas y fragancias, modifican la manera cómo otros ven a sus semejantes, todo eso a través de las sensaciones emocionales que procesa el cerebro.
Todas las emociones están conectadas al cerebro, por eso el comportamiento humano se activa con ciertos olores. Además, las feromonas mezcladas con otros olores encienden las alarmas de seducción de todas las personas.
Conocer qué perfume puede ir de la mano con la personalidad es una gran ventaja, no todos los aromas le sientan a todos por igual. Los estilos de una mujer o un hombre también pueden decidir qué clase de aroma les queda bien.
Hay que saber elegir muy bien los perfumes que se van utilizar, porque también transmiten un mensaje sobre quien los usa, a través de ellos las demás personas recordarán los encuentros casuales que compartieron juntos.
Los perfumes frutales y dulces, son perfectos para las personas alegres y joviales, lucen con su personalidad y eso lo pueden percibir otras personas. Lo dulce alegra el alma.
Los olores orientales van de la mano con las personas sofisticadas y elegantes. Las fragancias orientales son fuertes. Normalmente, este tipo de aromas se perciben a kilómetros de distancia, pero marcan la pauta en personas fuertes y con poder.
Para los que aman ser libres como el viento, las fragancias de flores y frescura son su carta bajo la manga. Estos aromas hablan por sí solos y confirman que son un alma libre.
Los aromas intensos van de la mano con las personas extrovertidas. Los olores intensos son esos que no pasan desapercibidos, son perfectos para las personas que tienen una autoestima muy elevada.
Por su parte, las personas tímidas prefieren aquellos perfumes que tienen una esencia suave y delicada, esos que no dicen mucho pero a la vez cautivan sonrisas.